ECONOMIA> Es posible

En países que la ONU clasifica como "en vías de desarrollo", donde la producción se basa principalmente en la agricultura y los bienes de consumo acabados son importados, por ejemplo Honduras; cuando los adolescentes se gradúan de la escuela secundaria y es el momento de forma a decidir su rama principal de estudio una de las prguntas que para estas personas tiene más peso es: "¿Seré capaz de sobrevivir haciendo una carrera en esta área?". Este fenómeno es común en toda a América Latina. Así que la poca gente que llega a la universidad decide entre un espectro muy reducido de áreas, siendo los principales: Medicina, Derecho, Contabilidad, Mercadotecnia, Agricultura, Ingeniería Industrial, e Ingeniería Civil. Esta es una consecuencia lógica de que haya una reducida cantidad de áreas en las que se basa la producción en estos países.
En Honduras, por ejemplo, que las personas con títulos universitarios trabajan en puestos bajos en las empresas en las dos principales ciudades, Tegucigalpa y San Pedro Sula. Dado que la demanda de mano de obra cualificada es limitado y muy específico, los graduados de escuela secundaria tienden a elegir especialidades en las que se contratarán más fácilmente. Además, cuánto puede aspirar a ganar un cierto tipo de profesional toma muy en cuenta. Esto ha llevado a muchas ciencias no se desarrollen. Muchos de los que realmente quisieran participar en el diseño o la arquitectura, por ejemplo, se dedican a algo más, ya que temen "morir de hambre" porque no conseguirán un empleo deseable o , en caso de encontrar uno, recibirán un salario miserable y poco empoderamiento. La solución que algunos han encontrado es abandonar el país. Ir a un país más desarrollado y alcanzar sus sueños allí. Hacer lo que les gusta hacer, y ganar una cantidad razonable de dinero y otros beneficios no financieros.
Sin embargo otros han sido valientes. Por ejemplo, el hondureño Carlos Campos, diseñador de moda. Ha logrado tener éxito en un entorno hostil. Esta es la prueba de que es posible encontrar a los caminos. Si las puertas están cerradas y tocas y nadie abre, haz tu propia llave y abrela por ti mismo. Estos países necesitan nuevos empresarios emprendedores. Si usted no se siente con vocación a una carrera tradicional, pero tiene miedo de que usted no sea recompensado como se merece, vamos, ánimo, a ser creativo, alza la vista y establece metas los más alto posible. Abra una brecha que seguirán otros.