Praeter um sententia

¿Qué es vivir en un país en vías de desarrollo? Ofrecemos el punto de vista de uno. La intención es mostrar las ideas detrás de vanguardia en un medio ambiente de seguidores

Buscar este blog

martes, 2 de noviembre de 2010

La solidez del matrimonio

Estaba aun en octavo grado cuando me cuestioné seriamente por primera vez acerca del significado del matrimonio. Hasta entonces todo era muy claro en mi mente, en algún momento todos llegamos a la edad en que nos casamos, lo hacemos, luego tenemos hijos y "vivimos felices para siempre". Pero aquella tarde, durante un ejercicio de oratoria, aquella aportación de esa joven movió las bases mi comprensión de la vida marital. -Si mi primer matrimonio no funciona, me divorcio y pruebo otra vez.- Dijo, hasta aquel momento el divorcio para mi algo así como una enfermedad extraña que afecta a una en cada veinte personas. Pero lo que vino después fue lo que me tocó, hasta momento el comentarios era uno de esos que "lo respeto, pero no lo comparto", -Yo no creo en el matrimonio.-

"¿El matrimonio es algo en lo que se puede creer o no?", me pregunté en aquel momento. Estaba algo confundido."El Matrimonio es algo que se contrae y luego hace la gente feliz (sino, ¿para qué tanta fiesta? Este es uno de los ritos que involucra celebraciones más pomposas alrededor del mundo), ¿o no lo es? ¿En realidad qué es el matrimonio?" Con esa duda volví a mi casa.

La conclusión a la que llegué es que el noviazgo no es algo que deba tomarse a la ligera. Noviazgos, relaciones serias, son la ecuación que da como resultado una boda. Es muy común ver como los personajes publicos fracasan en sus matrimonios, especialmente artístas de la televisión, el cine y la música. Bueno, también es común notar que las relaciones sentimentales prematrimoniales no son muy duraderas. No es que un noviazgo largo sea igual a un buen matrimonio, pero uno demasiado apresurado es signo casi seguro de fracaso. Así, con este ejemplo, es sencillo pensar que los matrimonios solidos y duraderos son la excepción a la regla; pero como dice el Arzobispo de Tegucigalpa el Cardenal Oscar Andrés Rogdriguez, "hace más ruido un árbol que cae que un bosque que crece".

Lo que me llama la atención ahora son los matrimonios que no han gozado un noviazgo libre, por llamarlo de alguna manera. Aquellos casos donde no son los esposos los se eligen, sino otras circunstancias. Como cuando los padres escogen la que deberá ser pareja de sus hijos, para citar un ejemplo. Es sorprendente la cantidad de matrimonios duraderos que hay de este tipo. Cuándo a uno de los progenitores no le gusta el novio o novia de su retoño por algo será.

En cuanto a mi pregunta de aquel día de octavo grado, ¿el matrimonio es algo en lo que se puede creer o no?, puedo responder que el matrimonio un factor muy determinante en la estabilidad emocional y la salud en general de las personas adultas. Por tanto, uno que no se debe tomar a la ligera. Finalmente agregar que yo si creo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Seguidores

Datos personales